Cotidianamente Silvina Garayo habita el territorio construyendo con otros y otras puentes de accesibilidad para la restitución y ejercicio de derechos. El programa que coordina se enmarca en el Sistema de Promoción y Protección de derechos de niños, niñas y jóvenes y en el Sistema de Responsabilidad Penal Juvenil (Ley provincial 13.298 y Ley provincial 13.634). Su trabajo profesional encuentra anclaje en Barrio Adentro, programa creado en el año 2008 que promueve el trabajo desde la lógica territorial; la construcción de dispositivos flexibles creativos de acuerdo a las necesidades, situaciones y derechos vulnerados de los niños, niñas, jóvenes y familias; el acompañamiento individual, familiar y colectivo; la capacitación de equipos territoriales; como la conceptualización y categorización de prácticas.
En términos de intervención profesional, Silvina cosechó su trabajo en Barrio Adentro asumiendo con compromiso ético, político y humano las múltiples dimensiones de la práctica profesional. Comenzó a transitar el espacio de trabajo como integrante del equipo en el barrio Altos de San Lorenzo de la localidad de La Plata, donde el programa se implementó hasta el año 2014. De esa fecha hasta estos días, Barrio Adentro encontró otro rumbo consolidándose en el barrio San Carlos. La referencia del equipo de trabajo se nuclea en el Espacio de Fortalecimiento Comunitario ubicado en calle 518 y 141, donde confluyen otros programas destinados a la promoción y protección de derechos de la niñez y la juventud.
De Altos de San Lorenzo a San Carlos, Silvina asumió la coordinación del programa. En el diálogo con Entredichos, nos cuenta que la coordinación de un programa es un lugar de conquista para el Trabajo Social, expresando que con nuevas responsabilidades -propias de su función- continúa realizando las ya consolidadas en su práctica profesional.
Con la claridad propia de su trayectoria y formación profesional en el trabajo de restitución de derechos, manifiesta que la intervención del Trabajo Social es asistencia y acompañamiento individual y familiar, pero también es planificación y gestión, es formación continua y posibilidad de conceptualizar la práctica. Ello en un trabajo donde los diversos saberes de los trabajadores y trabajadoras del equipo que coordina y de los sujetos de la práctica son valorados, escuchados y puestos en acto. La interdisciplina, intersectorialidad, y el trabajo en red caracterizan a Barrio Adentro. En términos de potencialidad de la práctica profesional expresa que “vamos por un Trabajo Social que vaya a la búsqueda del Otro”.
Durante el encuentro, también dialogamos con Silvina sobre su vínculo con la Facultad de Trabajo Social de la UNLP a través de las prácticas de formación profesional de la carrera. En la entrevista, nos explica que Barrio Adentro se constituyó como centro de práctica de formación del segundo y quinto nivel de la Licenciatura en Trabajo Social. En la actualidad, funciona como centro de prácticas de segundo nivel, permitiendo el tránsito de estudiantes de Trabajo Social por el programa en términos de formación profesional. Para Silvina, “como experiencia apuesta a la proximidad con el territorio, con la interdisciplina, y potencia la construcción de propuestas en lugares poco habitados por la disciplina. Abre un mundo de posibilidades para buscar una participación activa y propositiva en el ejercicio profesional futuro”.
Otro de los puntos clave de la entrevista es su opinión sobre la intervención estatal actual en el trabajo de promoción, protección y restitución de derechos de niños, niñas y adolescentes. A su entender, es el Estado quien tiene la responsabilidad de garantizar programas para y con la niñez. Según sus palabras, “las políticas públicas debieran avanzar en espacios para la niñez y la juventud”, que alojen, que promuevan y restituyan derechos vulnerados, que habiten el territorio “aspirando a un piso de igualdad en el ejercicio de derechos”.
La trayectoria profesional de Silvina nos invita a escucharla y dialogar con el equipo de trabajo de Barrio Adentro. Un grupo sólido, formado, interdisciplinario, que cotidianamente construye dispositivos flexibles, crea y recrea en la alteridad. Nos propone un desafío profesional colectivo que esté destinado a mejorar las condiciones de existencia de los otros y de nosotros. Nos convida una sistematización consciente y de largo alcance, una acción reflexiva como ejercicio inescindible de la práctica interventiva en los territorios donde el Trabajo Social pisa fuerte.
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